Cobre1
El cobre es un micronutriente esencial y componente central de muchas enzimas, incluyendo las implicadas en la síntesis de neurotransmisores, en el metabolismo energético y en el colágeno. La ingesta recomendada se ha establecido a partir de la media observada en varios países de la Unión Europea (UE).
Para adultos se ha propuesto una ingesta recomendada de 1,6mg/día (hombres) y de 1,3 mg/día (mujeres). En el caso de los niños de 1 a 3 años, se recomienda 0,7mg/día; 1mg/día para niños entre 3 y 10 años y 1,3 y 1,1mg/día para niños y niñas entre 10 y 18 años respectivamente. Para bebés de 7-11 meses se recomienda una ingesta de 0,4mg/día.
Para las mujeres embarazadas, se ha estimado un incremento de 0,2 mg/día para cubrir la cantidad de cobre depositado en el feto y la placenta en el transcurso del embarazo y en previsión de las necesidades de la lactancia; y, para las mujeres lactantes, se ha estimado el mismo incremento para cubrir la cantidad de cobre secretado con la leche materna. Para las mujeres embarazadas y lactantes, en definitiva, se ha estimado una ingesta recomendada de 1,5mg/día.
A partir de los estudios observados, se ha considerado que la absorción de cobre a través de la dieta es de alrededor del 50% para todos los grupos de edad y etapas de la vida. Si el suministro de cobre es menor de lo adecuado y el cuerpo no puede aumentar por sí mismo la disponibilidad, el resultado es la deficiencia de cobre. Algunos de los síntomas de deficiencia de cobre incluyen anemia, defectos neurológicos y piel laxa.
Hierro1
Para las mujeres embarazadas y lactantes, la EFSA opina que los VDR del hierro han de ser los mismos que para las mujeres premenopáusicas.
Si el suministro de hierro llegara a ser insuficiente para satisfacer las necesidades fisiológicas, primero se movilizarían las reservas de hierro; una vez se agotaran estas reservas sobrevendría la deficiencia de hierro. La anemia por deficiencia de hierro es el trastorno de deficiencia nutricional más común en el mundo. Las personas con mayor riesgo son las que tienen altos requerimientos de hierro debido al crecimiento (bebés, niños, mujeres embarazadas) o pérdidas altas (mujeres con fuertes pérdidas menstruales), o aquellos con mala absorción, por ejemplo, en la presencia de una infección/inflamación
En los hombres, la pérdida media de hierro es 0,95 mg/día, y la ingesta diaria de referencia se ha establecido en 11 mg/día. Para las mujeres posmenopáusicas, se proponen las mismas VDR que para los hombres. En las mujeres premenopáusicas, el hierro se pierde a través de la menstruación, pero, debido a que las pérdidas son muy sesgadas, se ha establecido una ingesta recomendada de 16 mg/día para cubrir las necesidades del 95% de la población.
En los lactantes y niños, se han calculado ingestas recomendadas teniendo en cuenta las necesidades de crecimiento. 11mg/día en lactantes (7-11 meses), 7mg/día en niños de 1-6 años y 11mg/día en niños de 7-11 años y jóvenes de 12-17 años. Para las niñas de 12-17 años, la ingesta de referencia de 13 mg/día es el punto medio del requerimiento diario calculado sobre el 97,5% del total de chicas y también la ingesta de referencia para las mujeres premenopáusicas.
Entre las conclusiones finales de la EFSA, se sugiere la necesidad de investigar el consumo de cobre y su estatus en grupos de población con un mayor riesgo de deficiencia de cobre, como los adultos mayores y las mujeres en edad reproductiva. Y en lo que respecta al hierro, se recomienda, entre otras cosas, investigar la relación entre la pérdida de hierro y eficiencia de absorción, sobre todo en mujeres con pérdidas menstruales altas.
1. http://www.efsa.europa.eu/sites/default/files/scientific_output/files/main_documents/4253.pdf
2. http://www.efsa.europa.eu/sites/default/files/scientific_output/files/main_documents/4254.pdf